Al llegar nos llevamos la sorpresa de que el departamento se comparte con otros huéspedes. Los espacios comunes (sala de estar, comedor) erán cómodos y limpios. La cocina y comedor no se podian usar supuestamente por medidas del covid, sin embargo si se podia usar por algunas personas. La habitación tenia espectacular vista, buen espacio, baño amplio, televisor con solo 3 canales nacionales, sin internet (solo habia internet en sala de estar) y para eso habia que bajar al primer piso. No habia agua caliente, el aire acondicionado en mal estado, la cama era dura, el cerrojo de la puerta estaba en mal estado por lo que daba poca seguridad. Buen aseo en general, aunque las toallas olian mal al igual que las almohadas. Lo Mejor, la atención de la anfitriona Chili, un encanto de persona, muy servicial y amable. La ubicación es fantástica, solo hay ruidos durante el dia pero a las 10 de la noche llega la policia y evacuan a todas las personas que deambulan por el paseo peatonal.