Me alojé 4 noches en este hotel y como resumen el hotel está muy bien para estar en Ubud en cuanto a habitaciones y piscina, el trato del personal es excelente y la ubicación no es la mejor pues hay que andar unos diez minutos hasta llegar a la zona de restaurantes.
Entiendo que es el peaje a pagar por tener un hotel con piscina amplia y entorno poco ruidoso.
Uno de los aspectos negativos es que la cama de la habitación primera se hundía, pero hablamos con recepción y nos cambiaron a una habitación más cómoda por lo que no puedo poner pegas.
Otro aspecto negativo es el desayuno, a pesar de tener tres opciones (indonesio, continental y americano) ninguna de ellas está muy rica y los zumos son discretos.
Pero todo ello lo suple la zona de la piscina que es bastante bonita y sobretodo el trato de todos los trabajadores del hotel que siempre estaban dispuestos a ayudar, siempre con una sonrisa y muy serviciales.
A mí me gestionaron el taxi de recogida del aeropuerto, el ferry a Gili Island y el cambio de habitación y todo ello con el máximo respeto y cortesía. Nunca he estado en un sitio en el que el trato hubiera sido tan bueno.
El precio es económico para la calidad que ofrece, si bien es cierto que es de los caros en Ubud.