La limpieza no es nada buena, huele mal, los colchones duros y con los resortes salidos. Al salir pedí que me dieran oportunidad de ir al Seven y dar la vuelta por el monumento a la Revolución y pasear en lo que mi esposa terminaba algunas cosas del trabajo, pero no me lo permitieron, el bellboy o como se llama el qué abre el portón y da la bienvenida me dijo que si, pero alguien salió corriendo a preguntar si ya había hecho checkout no podía dejar mi vehículo y casi rogando les pedí me dieran por lo menos oportunidad de ir al Seven y me dijo "10 minutos" y ya salí. La alberca bien, fría pero no era tiempo para estar mucho ahí, pero mi niño le gustó. Las chicas de recepción y los conserjes o no se quienes eran muy amables y buena onda, fue lo mejor del lugar, excepto esa señora que salió corriendo. En general no regresaría, por 100 o 200 pesos más me voy a otro mejor hotel. Aun así no regreso a ese hotel.